El interés sobre, entre otros, el origen geométrico de sus imágenes -en Mejuto explícito, en Balda sugerido- y la recurrencia de ambos, dentro de la tradición de lo abstracto, a la descomposición fragmentaria del cuadro para la consecución de otra imagen final, no es otra cosa que valerse del espacio y sus propiedades y del color como articulación de masas y vectores sobre fondos reticulares o de tramas.
Una de las aportaciones comunes de Balda y Mejuto es la capacidad de transmitir la sensación de orden sin disimular una indagación en su contrario, es decir, la especulación en el desorden de la imagen, obligando y sugiriendo al espectador a compartir y a recorrer las imperfecciones de ese sistema: la estructura -lo evidente, lo que ves- desvelando el planteamiento caótico del espacio.
Desde la apropiación y la deriva del contenido simbólico de lo geométrico, los dos artistas plantean en su exposición conjunta “SYN.GEOMETRÍA” una nominación irónica y distanciada de su trabajo exorcizando la influencia de ese germen racional y proyectivo, interrogándose además: ¿Qué conexiones provoca la geometría?, ¿Qué seremos sin geometría?.